Lunes

Devocional Familiar: Leer 2 Reyes 12, orar y cantar juntos

Devocional Personal: 1 Timoteo 1:1-2

La Salutación y Su Contexto

Esta semana comenzamos con nuestro estudio de las epístolas de Pablo a Timoteo. Las epístolas son cartas que forman parte del canon bíblico del Nuevo Testamento. Es común ver al principio de estas cartas un saludo por parte del autor de esta. En los versículos de hoy vemos la salutación de Pablo a Timoteo. Como veremos en la epístola, Pablo escribe esta carta a Timoteo con el propósito de confrontar las falsas enseñanzas y falsos maestros que se habían introducido en la iglesia en Éfeso. Antes de partir hacia Macedonia Pablo le había rogado a Timoteo que se quedara en Éfeso para que tratara con esta misma situación, lo cual nos permite comprender que el tema de las falsas enseñanzas y de falsos maestros era un asunto conocido por ambos. Pablo comienza su salutación identificándose como apóstol de Jesucristo. Antes de ser conocido como Pablo, este apóstol había sido en temido Saulo de Tarso perseguidor de la iglesia de Jesucristo. Reconocido como un fariseo intachable en la religión del judaísmo, ahora Pablo enfatiza en su salutación que él es apóstol de Jesucristo por mandato de Dios. Dios mismo lo escogió a él para esta tarea de apóstol y ya llevaba años sirviendo como tal a la iglesia. En cambio, Timoteo era un joven pastor que había escuchado la palabra de Dios desde pequeño (2 Timoteo 3:15). En el primer viaje misionero de Pablo y Bernabé, a causa de la persecución, terminaron llegando a la ciudad de Listra donde estuvieron compartiendo el evangelio (Hechos 14:6-7). Luego Pablo y Bernabé deciden volver nuevamente a los lugares donde ya habían predicado el evangelio (Hechos 15: 36), terminando nuevamente en la ciudad de Listra. Es aquí donde Pablo escucha que daban buen testimonio de la fe que tenía Timoteo en Cristo y Pablo decide llevarlo con él para la obra misionera (Hechos 16: 1-5). Conociendo ahora un poco del trasfondo de Pablo y Timoteo, vemos que en esta salutación Pablo enfatiza que solo Jesucristo es nuestra esperanza y nuestro Salvador. Esto es precisamente en lo que debe estar centrada nuestra vida cristiana, en Jesús nuestra esperanza, nuestro Dios y Salvador. Al final de la salutación Pablo pide en oración gracia, misericordia y paz de parte de Dios y de nuestro Señor Jesucristo para Timoteo. Pablo sabia que lo que enfrentaría Timoteo no sería fácil y que necesitaría de la gracia de Dios, de su paz y de su misericordia para glorificar a Cristo al confrontar con la verdad a falsos maestros y falsas enseñanzas que se habían introducido en la iglesia de Éfeso. Pues siempre debemos destruir las falsas enseñanzas con el verdadero evangelio de nuestro Señor Jesucristo.

Desafio y Aplicación

Como discípulos debemos pedir al Señor en oración gracia, misericordia y paz para llevar la verdad del evangelio a un mundo lleno de tanta falsa enseñanza. La falsa enseñanza lleva a la destrucción a millones de almas que siguen la mentira. En el día de hoy reconoce la dependencia en Dios para alumbrar en medio de la oscuridad del mundo con la luz del único y verdadero evangelio, las buenas nuevas de nuestro Señor Jesucristo.